Los olvidados de la Clínica Martha que llevan hasta la fecha de hoy 16 meses en asamblea permanente, nos abren las puertas para adentrarnos en la oscura administración, cuyo descuido también ha sido permenente en la falta de pago de sueldos y prestaciones sociales.
Mientras que personas tan serviciales como Humberto Torres y Felipe Negrette sufren por los inconvenientes del estrés de un día aburrido, los trabajadores de la Clínica Martha viven felices en las perturbadoras noches, a la intemperie del clima y criminales, todo por exigir sus derechos.