
Villavicencio reafirma su apuesta por convertirse en un destino turístico de primer nivel con la instalación oficial del Consejo Local de Turismo, un órgano de concertación y planeación estratégica que busca fortalecer la industria turística bajo el lema que ya es marca de ciudad: “Villavo, aquí está el llano”.
La iniciativa, liderada por el alcalde Alexander Baquero y el Instituto de Turismo de Villavicencio (ITV), reunió a ocho gremios económicos y turísticos, consolidando un espacio multisectorial que promete ser la brújula para el desarrollo turístico sostenible y competitivo en la capital del Meta.
“Este es el escenario ideal para definir una hoja de ruta clara sobre el futuro de esta industria en la capital del Meta, integrando las propuestas del sector privado para consolidarla como un destino atractivo a nivel nacional e internacional”, aseguró Henry Palma, presidente de la Junta Directiva de la Cámara de Comercio de Villavicencio.
El director del ITV, Mauricio Salinas, resaltó la importancia de reactivar este consejo —que llevaba varios años inactivo— como herramienta clave para dinamizar la economía local a través del turismo, un sector que genera empleo, activa cadenas productivas y promueve la identidad llanera.
El Consejo Local de Turismo, establecido mediante el Decreto 0132 de 2025, está conformado por:
El alcalde de Villavicencio o su delegado
La Cámara de Comercio de Villavicencio
Delegados de Cotelco, la Asociación de Fincas Turísticas, el Clúster Gastronómico del Meta, y el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD)
Representantes de asociaciones de artesanos, universidades y organizaciones de transporte especial
Con esta estructura, el municipio busca consolidar un modelo de turismo inclusivo, participativo y con enfoque de sostenibilidad. Porque si “Villavo, aquí está el llano”, también deben estar la planificación, la articulación y la visión a largo plazo.
Esta nueva etapa en la gobernanza turística local no solo pone en la mesa las voces del sector privado y académico, sino que abre la puerta para que el turismo deje de ser una promesa y se convierta en una verdadera palanca de desarrollo.
Villavicencio quiere mostrarse al país y al mundo como lo que realmente es: una ciudad que vibra con el llano, pero que también se prepara para recibir al mundo.



